A partir de marzo retomamos las actividades de entrenamiento y mantención de las co-terapeutas y recientemente, el 1 de abril, retomamos las terapias con los niños de la escuela especial Andalué de Maipú.
Estas actividades no son azarosas, las yeguas son frecuentemente evaluadas en todo ámbito razón por la cual el objetivo de los entrenamientos varía constantemente.
Cada yegua tiene sus propias fortalezas y debilidades, las diferencias de carácter y condición física que existen entre los cinco integrantes del equipo nos obliga a poner especial énfasis en sus propios objetivos. Nuestro trabajo no nos permite margen de error y es por eso que debemos ser exhaustivos en nuestro quehacer como preparadores de yeguas para hipoterapia. Para ésto, realizamos entrenamientos diariamente en los cuales efectuamos ejercicios con los diferentes implementos que utilizamos durante las terapias, además de ejercitar las diferentes posiciones que adoptan los niños durante la sesión.
También constantemente sometemos a las yeguas a una evaluación veterinaria en la cual se administran periodicamente antiparasitarios y vacunas además de chequear su correcto estado físico . Si alguna de ellas no llega a estarlo, su preparación se suspende hasta que su estado de salud se restablezca. El trabajar con una yegua en mal estado significaría un gran riesgo tanto para la yegua como para los para los niños y voluntarios. La labor del Medico Veterinario es fundamental en este proceso.
El trabajo de los voluntarios también debe ser capacitado y es por eso que constantemente se realizan reuniones evaluativas y capacitaciones que permiten que cada uno sea capaz de desembolverse cualquiera sea la labor que le corresponda desempeñar. Todos los voluntarios deben tener conocimientos tanto de manejo básico del caballo como de la interacción con los niños durante las sesiones.
Como ya se mencionó anteriormente, la mantención de los cinco co-terapeutas: Chela, Mantequilla, Buenamoza, Blanquita y Manjar, es fundamental. Por esta razón es que cada uno tiene asignado un encargado el cual coordina todos los manejos necesarios para mantenerlo en óptimas condiciones. El cuidado del pelaje, estado de las herraduras y la alimentación cobran gran importancia en caballos expuestos a un régimen de trabajo como que el que realizamos en el Centro de Hipoterapia. Uno de los aspectos que cobra gran importancia y que requiere especial cuidado es el del manejo de las patas. Los cascos de los cuatro miembros deben ser limpiados cada vez que el animal realiza algún ejercicio en cancha para evitar así la proliferación de hongos y evaluar el estado del herraje.
Los voluntarios son un factor fundamental en el correcto funcionamiento del Centro de hipoterapia, gracias a su trabajo y dedicación es que a diario podemos hacer realidad este gran proyecto.
Muchas gracias a todos los que día a día permiten que este sueño se convierta en una realidad...
Sergio Hernández Ávalos, M.V.
Director del Centro de Hipoterapia Mundo Granja.
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